Marianela Larzabal nos cuenta acerca del movimiento cultural Takates.
En la ciudad Las Piedras hace un año que existe un espacio de participación e integración, hace un año que los colectivos de la zona tienen un lugar donde encontrarse. Hace un año que lo vecinos acceden a espectáculos musicales y asisten a distintos talleres. En Las Piedras hace un año que existe en una vieja casona del centro el Movimiento Takates.
La participación es necesaria para la vida si quiere ser considerada humana, es apropiación de espacios, empoderamiento e intercambio. En todo Uruguay existen estos espacios, algunos son referentes para la población, otros recién comienzan y muchos son proyecto próximos a gestarse.
Marianela Larzabal es integrante de Ellas, colectivo feministas de la ciudad de Las Piedras que junto a otros colectivos integran el movimiento. La invitada contó acerca de los inicios “Takates inicia con tres compañeros Esteban, Santiago y Marcel, que son músicos, ellos empiezan en la cocina, en la previa, a soñar un espacio que funcione como centro cultural, generar encuentros…” luego la idea se amplió y comenzaron a participar otros colectivos y personas.
“El Movimiento cultural Takates pretende ser un espacio que congrega a diferentes colectivos que trabajamos diferentes áreas de la cultura pero tenemos en común la ganas de participar”. El colectivo de artesanos organizan mensualmente una feria con espectáculos, donde no solo se apunta a la venta de artesanías sino a la generación de un espacio cultural integrador para la ciudad. La tribu tambor, comparsa del lugar, se juntan en la casa Takates y ofrecen talleres gratuitos de candombe. Colectivo Ellas encontró un lugar donde reunirse para poder formarse en perspectiva género, derecho y equidad a la vez que promueven actividades.
Llevan adelante la coordinación e intercambio en una reunión quincenal no solo para organizar espectáculos sino para cranear el funcionamiento general de la casa. Se reúnen para fortalecer la apropiación y el cuidado del espacio que integran y así poder habilitar el espacio cada vez a más personas.
Actualmente por la casa pasan aproximadamente 400 persona por semana, las maneras y medidas de participación y trabajo son variadas. Como suele pasar con la autogestión, no hay una seguridad económica y los métodos para subsistir son varios: actividades, talleres, espectáculos, socios colaboradores, el trabajo militante además del intercambio o canje.
Todo esto comenzó hace apenas un año, aún hay mucho por fortalecer, pero “estamos logrando esa comunión con los vecinos y vecinas”, el espacio es para toda la familia porque el énfasis está en abrir el camino, en darle el lugar a otro para ser y decir. Habilitar y dinamizar la cultura en la comunidad.
Marianela expresa que desde lo personal integra el movimiento por la “Convicción de que la revolución es solo cultural y es por mecanismo de encuentro y generar espacios diferentes (…) instancias de conversación de difusión y de esparcimiento también (…) es una forma de activismo social”.
Takates tiene una agenda tupida que puede encontrarse en su fanpage. Los viernes hay música en formato acústico, los segundos sábados de cada mes está la feria artesanal con espectáculos simultáneos, La de julio es una milonga que se realiza el tercer sábado de cada mes y entre otras actividades, en vacaciones de julio se abre un espacio de juegos y dinámicas para adolescentes y adultos.
Texto: Colectivos
Foto: Johana Parodi
Enterate más acerca del colectivo escuchando la entrevista completa aquí:
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