Alfonso Enrique Domínguez Maidana nació en Durazno el 24 de septiembre de 1965. Fue campeón de América con la selección en 1987 y ese mismo año también consiguió la copa Libertadores con Peñarol. Pero la charla que nos compete con “La Guacha” –un apodo excelente para un futbolista– es su participación con la selección uruguaya en el Mundial de Italia 1990, nada más ni nada menos que dirigido por el maestro Oscar Washington Tabárez.
Alfonso disfruta hoy un presente tranquilo, en su ciudad natal, alejado del fútbol profesional y disfrutando de la actualidad de la selección. “La Guacha”, que fue dirigido por el maestro tanto en Peñarol como en la selección, cuenta que aprendió muchísimo de él, “comprendí lo que es la formación de un grupo para grandes logros y hoy el tiempo nos muestra que esta selección está en muy buenas manos”.
También contó de su participación en el mundial de Italia 90, “vivía el día a día asombrado, lo que era la organización, nunca podía manejar saber lo que era tener todo al alcance de la mano y que tengo que dar todo al 100% (…) fue una experiencia que nunca imaginé que iba a vivir, nos preparamos para esto contra las mejores selecciones tres meses antes”, y remata: “para darse cuenta de lo que es la suerte de vivir un mundial hay que estar dentro de el plantel y darse al máximo”
La posibilidad de jugar una copa del mundo no la tomó como una presión, sino como una responsabilidad linda, no cualquiera tiene la chance de conseguirla, hay que estar tocado con una varita mágica para poder cumplir ese sueño que miles desean “todos quieren ser ese jugador que represente al país, uno imagina a los niños en la escuela soñando con un ser uno de esos”.
También “La Guacha” repasó cómo fue el camino de Uruguay en la previa y luego la disputa del mundial, habló de ese maldito penal errado contra España y del merecimiento que tenía ese plantel de haber terminado mejor con esos jugadores que había. De todos modos dice que para ese grupo el balance fue positivo y que fue un punto de partida para cambiar algunas cosas a futuro.
La charla siguió por la actualidad de la selección, de cómo era el fútbol de antes comparado con el fútbol moderno y de lo que hay que tener para conseguir grandes logros como ser campeón de América (como él lo fue, tanto con Uruguay como con Peñarol) sobre esto último habló de la humildad, de la formación de un grupo, y de la manera de insertarse en el mismo, y de otros aspectos que tiene que tener un futbolista como el sacrificio y el cuidado personal para llegar a los logros y que incluso así a veces no se alcanzan, pero que lo más importante es la experiencia y el aprendizaje personal.
Al cerrar la entrevista, se debatió sobre las comparaciones odiosas entre Messi y Maradona, y que tuvo cada uno al alcance de la mano para ser el mejor del mundo en su época. También de la experiencia de haber jugado en los dos grandes de nuestro país y en un grande del fútbol argentino y las diferencias estructurales y económicas entre un fútbol y el otro pero dejando en claro también las diferencias entre los futbolistas que surgen de cada país.
Te dejamos acá la entrevista completa con Alfonso “La Guacha” Domínguez en Matemáticamente tenemos chance.
Texto: Dario Larmini
Foto: equiposdefutbol2.blogspot.com
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