El rostro es el símbolo de lo primero que registramos cuando vemos a una persona, es la primera presentación ante el otro. Negrxs, blancxs, asiáticxs y afrodescendientes pueden ser todxs montevideanxs, y deberían poder habitar y convivir en la ciudad bajo las mismas condiciones. En Trazos, tratamos el tema de la migración con la visita de Agustina Márquez y Victoria Romero, presentando su proyecto Rostros Mixtos. Se trata de una recopilación de retratos de personas con diferentes nacionalidades de la ciudad de Montevideo para componer un collage conformando nuevos rostros, interviniendo en espacios públicos y potenciar así el valor de la interculturalidad.
Su primera intervención fue en el dique Mauá, donde se expusieron una colección de seis gigantografías a base de collages con diferentes partes de la cara de inmigrantes y uruguayos, estos últimos pasaron a formar parte del proyecto al tomar conciencia de sus orígenes extranjeros. Motivado y sensibilizado por las nuevas olas migratorias que arriban al Uruguay, este proyecto busca cuestionarse sobre los rostros que tenemos como sociedad, que son mucho más diversos de lo que pensamos.
De esta forma, a raíz de Rostros Mixtos han surgido otros proyectos con el mismo objetivo de explicar la interculturalidad y las mixturas que se dan en los intercambios culturales de las migraciones, como por ejemplo: Recetas Migrantes (un recetario de cocinas del mundo realizado por migrantes con productos que podemos encontrar acá); y Cartografías Migrantes (una aplicación que sirve de guía de apoyo y ayuda para los trámites burocráticos de las migraciones).
Rostros Mixtos nos invita así a ‘‘pensarnos como individuos igualmente diferentes, deconstruir y construir nuestra ciudad y sus vínculos, como proceso de transformación social”. En definitiva, “somos rostros mixtos porque todos venimos de otros lugares”.
Texto: Beatríz Del Corte