El avance radical de los incendios, motivados por el avance del agronegocio, la expansión de la explotación agrícola y otras vertientes, como la minería, caracterizan las actividades del gobierno brasileño bajo una explotación extractivista fomentada por el presidente Jair Bolsonaro. Aguilar apunta el discurso del mandatario como promotor de los incendios, al difundir ideales en contra de los indígenas, como dificultades para el progreso del país y sus áreas de preservación ambiental, como estancamiento económico. El 10 de agosto, en el estado de Pará, estancieros promovieron el ‘Día del Fuego’, con la intención de mostrar al presidente el acuerdo con aumentar la frontera agrícola para trabajar las tierras.
Ante los datos emitidos por el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), que demuestran el aumento de la deforestación y alertan de la situación, Bolsonaro respondió echando al director del organismo. Aguilar explica los diferentes sectores que se articulan para trabajar desde el Congreso: la bancada de la bala, que trabaja para la liberación de las armas, la bancada del buey, para aumentar las áreas de explotación ganadera, la bancada evangélica y la bancada ruralista, que se dedica al agronegocio desde el Congreso. El periodista sostiene que la política ambiental de Bolsonaro genera resistencias incluso en la bancada ruralista y dificulta las relaciones diplomáticas brasileñas.
‘‘El Estado pasa de ser omiso a ser promotor, al señalar los lugares donde continuar con la explotación, y se convierte, así, en agencia promotora del saqueo y la violencia’’, sostiene Aguilar.
Si querés saber más sobre la cobertura mediática, el papel que desarrolló la prensa hegemónica sobre la figura de Bolsonaro, el movimiento de resistencia indígena y las repercusiones internacionales de la situación, escuchá la entrevista completa acá: