El 29 de marzo cambiamos los ñoquis por un plato de polenta con grumos. Las polentas nos pusimos brujas, lamias, arpías y revolvimos la olla de nuestro cuarto programa.
En esta oportunidad, condimentamos la olla con un tema picante, preguntándonos sobre lo que sería ser mujer ¿Se puede decir que las mujeres somos brujas? ¿En qué sentido? ¿Qué es ser una bruja? ¿Se habla de una figura de ficción? ¿Y las personas reales que fueron perseguidas y quemadas en las hogueras? ¿Estas figuras son del pasado o siguen vigentes en la actualidad? Las ideas que tenemos sobre las brujas, ¿repercuten de alguna forma en el ser de las mujeres hoy? ¿Por qué la figura de la bruja es recuperada hoy con las luchas feministas? ¿Cómo es posible que cientos de miles de mujeres llamadas brujas fueran objeto de un aniquilamiento en masa y esto haya pasado inadvertido? ¿Se relaciona este exterminio con lo político? ¿Qué había de subversivo en las brujas por lo que querían eliminarlas?
“La batalla contra la magia siempre ha acompañado el desarrollo del capitalismo, hasta el día de hoy. La premisa de la magia es que el mundo está vivo, es impredecible y hay una fuerza de todas las cosas, ‘agua, árboles, substancias, palabras […]” (Silvia Federici 2015: Calibán y la bruja Mujeres, cuerpo y acumulación originaria, p. 281).
Conversamos sobre este texto de Silvia Federici que sirvió de excusa para saborear el tema, y pensar acerca de cómo la fuerza del capitalismo suele contraponerse a la magia, entendida como una multiplicidad de fuerzas diferentes que provienen de todo lo existente: las mujeres, los hombres, las brujas, las estudiantes, las niñas, los niños, los animales, las palabras. Y esas fuerzas están vivas y son impredecibles, es decir, a cada momento tienen que decidir cómo articularse entre sí, pero ya no tienen que obedecer a esta fuerza mayor del capitalismo, sino que se dan su propio orden que es otro. Y esta articulación de las fuerzas es la manera en que se agrupan, se “agruman”, podemos decir las polentas.
Acompañadas de músicas como Gatta Cattana, Man Rai y Ana Tijoux, mujeres empoderadas que también nos invitan a seguir pensando y sintiendo desde una perspectiva crítica, dejamos abierta la olla para una discusión filosófica que da para seguir revolviendo.
Texto: Polentas Grumosas
Imagen: Polentas Grumosas