Rolando Castello Junior: la leyenda viva del hard rock brasilero

Por primera vez en nuestro país, una de las leyendas vivas del hard rock llegó con sus 50 años de trayectoria musical para presentarse este viernes. Rolando Castello Junior, baterista brasilero, nada más ni nada menos que cofundador de la histórica banda argentina Aeroblus –que lideraba el gran Norberto “Pappo” Napolitano– y también fundador de una de las primeras bandas del hard rock brasilero como lo es Patrulha do Espaço.

El pasado miércoles, en los estudios de Radio Pedal, recibimos una visita histórica.

Por primera vez en nuestro país, una de las leyendas vivas del hard rock llegó con sus 50 años de trayectoria musical para presentarse este viernes en Bluzz Live a partir de las 22 hs.

Hablamos de Rolando Castello Junior, baterista brasilero, nada más ni nada menos que cofundador de la histórica banda argentina Aeroblus –que lideraba el gran Norberto “Pappo” Napolitano– y también fundador de una de las primeras bandas del hard rock brasilero como lo es Patrulha do Espaço.

Rolando no vino solo, con él estuvieron Santiago Bordoni, guitarrista de la banda Oro, y Nicolás Foti, dibujante argentino (casi uruguayo) quien fue el que hizo el nexo con Rolando para que viniera a tocar a nuestro país por primera vez.

Obviamente en la charla no podía faltar nuestro querido columnista don Marquitos Motosierra que, según Rolando, es “un verdadero rockero”.

Este viernes Rolando Castello Junior estará arriba del escenario con su inagotable batería junto a La Triplice Band, un conjunto de músicos que integra Santiago Bordoni, Chester Rezzano, Federico Pereda, Nicolas Lipolli, Sergio Rodríguez y Marta Benévolo (actual voz de Patrulha do Espaço).

Previo a esta presentación, el señor Rolando Castello Junior pasó por Sapos de otro pozo y nos dejó un montón de anécdotas y conceptos musicales en una charla tremendamente disfrutable que pasó por distintos climas y que nos lleno de sabiduría.

Un tipo sumamente descontracturado, con un tono brasilero-aporteñado que le sale por los poros, Rolando es un rockero añoso, vestido de pantalón, campera de cuero y gorro negro; su pelo canoso y largo junto a su barba con trenzas marca un estilo y una impronta que lo caracteriza como un tipo que, además, muestra un espíritu juvenil entrañable; a las claras se nota que lo único que tiene ganas de hacer es seguir haciendo lo que hizo toda su vida: pegarle a la bata.

La charla obviamente arrancó desde la historia, el año pasado Rolando cumplió 50 años como músico, él comenzó a tocar la batería a los 13. “No se cómo sucedió, me caí y me di la cabeza contra la batería y ¡a cagar, ya estaba ahí!”, bromea.

Muchas veces se dice que el baterista es el relegado, pero en realidad es el músico que lleva adelante el ritmo de la banda, y tiene la mejor ubicación en el escenario.

Sin embargo, para Rolando la ubicación no es lo más importante sino la manera en que suena el instrumento, incluso nombró algunos bateristas que innovaron en poner la batería por delante, tanto Marky como Santiago coincidieron en que la batería es el instrumento que marca la banda. Ambos tienen bateristas muy potentes.

Rolando comenzó su carrera como cualquier joven, armando una banda callejera con amigos de la calle en San Pablo. En los años 70 se fue a vivir a México y tocó con El tri –que a esa altura ya era una banda grande–, también tuvo un breve pasaje por Estados Unidos, donde fue a probar suerte pero se volvió por las dificultades que mostraba ese país y porque también extrañaba Brasil.

A mediados de los años 70, conoció a Alejandro Medina, se hicieron muy amigos ya que este se fue a vivir a San Pablo y coincidían en los mismos lugares, un buen día Alejandro le presentó a Pappo del cual Rolando ya era un gran admirador, “¿Me estás jodiendo?” decía Rolando. Los primeros discos de Pappo le volaron la cabeza y cuenta que la primera vez que se vieron “El Carpo” le destacó más su auto –tenía un motor V8– que su destreza en la batería. “Ni siquiera me saludó”, comentó entre risas.

Medina buscó a Rolando para formar Aeroblus y todo se dio muy rápido, al poco tiempo Rolando estaba viviendo con Pappo y ensayaban todos los días desde las cuatro de la tarde a las diez de la noche. Algunas canciones Pappo ya las tenía armadas, pero muchas de las versiones iniciales se iban arreglando ahí. “Pappo era un tipo muy cuadrado, pese a que sus gustos musicales eran variados” comentó Castello.

Rolando nos contó que la muerte de “El Carpo” lo tomó sumamente por sorpresa, lo llamaron de la prensa para opinar de esto y él estaba durmiendo, no sabía si se trataba de una broma o qué. “Fue una tristeza inmensa, sentí que yo perdí a un gran amigo y que el resto perdió a un músico inigualable. Más allá de la distancia, la amistad siempre estuvo vigente”.

También comentó que la diferencia entre el rock argentino y el brasilero es que en Brasil nunca hubo un músico como Pappo, porque si bien había grandes guitarristas, ninguno tenía la potencia y la personalidad de “El Carpo”. “Él era íntegro, cuando uno elige algo en la vida tiene recompensas y pérdidas, ganarás y perderás según lo que elijas”.

Rolando abandonó Aeroblus muy rápido por la situación política en Argentina, en plena dictadura era muy difícil andar por la calle, y entre risas comentó: “Además… no había porro”.

Posicionándonos en esta época, la charla se derivó a que hoy en día “los jóvenes no quieren pensar y el rock está muriendo”. Incluso se ironizó con que para que el rock volviera a renacer tendría que volver la dictadura, para que haya una nueva rebelión.

El mercado de la música se volvió muy comercial y el rock de la vieja guardia se perdió y todo el esfuerzo que uno puede hacer es a base de plata y sacrificio. “Todo es muy mediocre, el que toca rock lo hace por amor”, comentó Rolando. También señaló que la digitalización de la música ha arruinado a las bandas, cuesta vender los discos, por eso también es difícil que una discográfica vaya a buscar una banda de rock hoy en día.

Patrulha do Espaço es la banda con la que hace más de 30 años viene tocando, si bien ha variado la formación, siempre mantuvo un eje central, Rolando contó que “era muy difícil hacer una banda de hard rock en los 70, ser rockero y peludo estaba mal visto y era difícil que una banda sonara bien, había que laburar mucho”.

La Patrulha fue pionera en sacar un disco independiente en Brasil, y hasta hoy mantienen esa independencia, de todos modos este será el último año en que la banda va a tocar en vivo “es hora de parar, me tiene la bolas hinchadas”, contó entre risas.

Rolando nos contó que todas las etapas del grupo fueron muy distintas y que es difícil destacar una porque “todas las épocas tuvieron su encanto”. Tocar con Arnaldo Baptista (ex miembro de Os Mutantes) fue increíble, es un gran artista”. De todos modos hoy está muy conforme con la actual formación, la banda siempre suena bien y no necesitan ensayar, hoy en día disfruta mucho salir a tocar y hacer lo que les gusta.

Sobre bateristas actuales. Le consultamos si tenía alguno en particular que recomendara, respondió que hoy está lleno de bateristas buenos, pero que muchos son bateros digitales, la tecnología ha matado la técnica y existen un montón de talentosos pero que difícilmente pueden encajar en una banda, son buenos tocando solos, pero a la hora de ensamblar con otros les cuesta.

Este viernes Rolando Castello Junior se presenta por primera vez en nuestro país, su llegada fue gracias a Nicolás Foti con quien mantiene una buena amistad. Foti venía a festejar su cumpleaños a Montevideo y fue el mismo Rolando que le dijo: “si voy a Uruguay, a tu cumpleaños, quiero ir a tocar”.

Sobre su tardía llegada a nuestro país. Dijo que por distintos motivos nunca se pudo dar, antes quizás había muchas más dificultades para llegar acá.

“Hoy se juntaron muchos factores, los músicos con los que voy a tocar son de bandas que a mí me gustan y será un placer poder tocar con ellos en vivo”, afirma Rolando.

El repertorio del show va a constar en un set list no muy extenso, entre canciones de Aeroblus y de Patrulha do Espaço, “vamos a tocar con el alma y el corazón y a pasar una buena noche de rock and roll”.

Al finalizar la charla, Rolando contó que está armando una banda nueva en Brasil que se llama Cash, es un trío que tiene teclados y viola y hacen rock progresivo, es un proyecto que no va a llevar la carga de tener que salir a tocar en ruta, pero sí la responsabilidad de sonar bien.

También hará algunos recitales despedida de Patrulha do Espaço. Deseamos fervientemente que esta no sea la primera y última vez que venga a tocar a nuestro país.

En una charla realmente más que amena pasamos un momento sublime con esta leyenda del rock brasilero, abarcamos muchísimos temas de diversa índole musical, además de lo que te detallamos en estas líneas; te invitamos a que disfrutes la nota completa en el siguiente link y te recomendamos esta noche ir a ver el semejante show que dará Rolando Castello Junior acá, en Uruguay.

Texto: Darío Larmini

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