Presentes es un documental en vías de realización que trata sobre la memoria de la lucha, la represión y la crítica al terrorismo de Estado y sus consecuencias actuales en Uruguay.
Este largometraje está a cargo de Abel Guillén y Javier Alcázar, españoles oriundos de Murcia, que empezaron a filmar este proyecto el año pasado. Al ser cuestionados sobre su interés particular en nuestro país durante su entrevista en Trazos, Abel explicó que él es historiador y vino a Uruguay a terminar su trabajo final de maestría. Fue así que surgió y creció su interés en los años anteriores a comenzar con el plan del documental. “Me fue atrapando la temática sobre todo a través de la gente que iba conociendo; el contacto con organizaciones sociales, con personas que vivieron estas historias de lucha y de horror”. También ambos realizadores creen que estos temas “son de carácter universal, que todos los países que han vivido dictaduras han pasado por etapas similares de transición y necesitan del rescate de esa memoria para poder mirar al pasado, entender el presente y seguir mirando al futuro a través del análisis”, sostiene Abel. El porqué de haber elegido Uruguay particularmente se dio más que nada gracias a la conexión que Guillén hizo con su gente.
Los dos españoles se conocieron en el liceo y según ellos, fue la ideología política en común que los unió. Hoy en día, casi 16 años después, siguen haciendo un buen equipo y formaron Labrando Producciones, la productora con la cual están realizando Presentes. Tienen la idea de seguir usando esa productora para proyectos con fines más bien sociales y políticos, es decir, proyectos del estilo que de alguna manera beneficien a la sociedad y toquen temas necesarios de tocar, como este último. “Labrando Producciones mantendrá la consciencia que nosotros mantengamos; somos gente activa en movimientos sociales y entendemos que nuestra productora siempre será así”.
Una de las particularidades que distingue este documental, aparte de que sus realizadores son extranjeros, es que estos decidieron retratar principalmente el interior del país y las experiencias de sus habitantes. Esta decisión la tomaron, ya que opinan que “cualquier país que pasa por una etapa traumática social tiene que rescatar la memoria más del interior porque el silencio posterior es mucho más pesado ahí”. Según ellos, todos los trabajos académicos o de cine, por ejemplo, suelen centrarse en grandes organizaciones que en general se encuentran en la capital del país. “Las historias del interior son más difíciles de rescatar y se quedan más silenciadas”; la intención de Abel y Javier es ayudar a que la memoria de esos rincones del país no se pierda.
Guillén cuenta que pudo asistir tres veces a la Marcha del Silencio. La describe como muy cargada de emoción, “un silencio atronador, muy potente”. De hecho, el nombre del documental está inspirado en el grito de “presente” que se da cuando en la marcha aparecen las caras y suenan los nombres de los desaparecidos uno por uno.
Javier y Abel siguen buscando fondos para poder terminar de financiar su documental. “Necesitamos pasar por este tramo económico para poder terminarlo y hacer de este documental un documental de buena calidad, bien cerrado, bien limado”. Para eso se unieron a la página Goteo, que fomenta que proyectos así se produzcan sobre la base de pequeñas aportaciones que hace la gente para lograr un producto documental autónomo donde ningún gran donador o empresa pueda condicionar el contenido. “Este es un proyecto libre y nace con una intención libre”.
Para colaborar entrá en www.goteo.org/project/presentes .
Texto: Martina Vilar del Valle
Escuchá la entrevista completa acá:
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