Cuarentena en la calle

Luego de la confirmación de casos de coronavirus en Uruguay el viernes 13 de marzo, el foco de atención se centró en las medidas que se estaban tomando desde el gobierno para reducir el impacto de la pandemia. Más allá de la discusión sobre si estas definiciones han sido las correctas, el análisis debe tener en cuenta la realidad que viven distintos grupos de personas que habitan el país, cuya situación los hace particularmente vulnerables. Uno de ellos es el caso de las personas en situación de calle.

Con ese fin el lunes 16 de marzo el colectivo NITEP (Ni todo está perdido) lanzó a través de redes sociales una convocatoria bajo el título “¿Dónde cumpliremos con la cuarentena las personas en situación de calle?”. Bajo esta consigna se desarrolló un intercambio en el que además de lxs integrantes de ese colectivo que nuclea a personas en situación de calle, participaron representantes de la Defensoría de Vecinas y Vecinos, de la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH), de la Dirección Nacional del Liberado (DINALI), el Centro Cultural Urbano, la diputada Verónica Mato e integrantes de otras instituciones. A lo largo del encuentro se profundizó en las dificultades que tienen las personas en calle para seguir los protocolos de cuidados difundidos por el Sistema Nacional de Emergencias (SINAE) y se esbozaron una serie de propuestas para plantearle a las autoridades con la finalidad de que se contemple su situación.

Situación de calle, salud y cuidados

Según datos del Censo de personas en situación de calle realizado por el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) en abril de 2019, en la noche en que se realizó el censo se encontraron 2038 personas en situación de calle: 1043 fueron las personas que estaban durmiendo en la intemperie y 995 las que lo hacían en refugios. A lo largo de los cuatro conteos realizados por el MIDES entre 2006 y 2019, la cantidad de personas en calle muestra una tendencia creciente.

Frecuentemente se señala el deterioro de la salud como uno de los riesgos asociados a la situación de calle. Los problemas de salud pueden ser tanto causa como efecto de la falta de vivienda. Las personas con problemas de salud pueden ser excluidas más fácilmente de la vida social y del acceso a la vivienda y por tanto en muchos casos los problemas de salud aparecen entre las múltiples causas que llevan a la situación de calle. A su vez, la vida en la calle genera efectos nocivos sobre la salud de las personas, en parte debido a que en ese contexto se vuelve más complejo acceder a los servicios de salud y desarrollar rutinas de cuidados sanitarios y buena alimentación.

Es en este sentido que desde NITEP plantean que las personas en situación de calle conforman “un sector de la ciudadanía de alto riesgo”. Por un lado, el riesgo está dado porque se trata de una población envejecida (en relación al total de habitantes del país) que presenta una alta prevalencia de problemas de salud. Según datos del MIDES, 1 de cada 3 personas en intemperie y 2 de cada 3 personas en refugios declaran tener algún problema de salud, y entre ellxs muchxs presentan comorbilidad.

Por otro lado, el riesgo también viene dado porque estando en la calle es muy difícil tomar medidas básicas de prevención de contagio como el distanciamiento social o la higienización permanente de las manos. Esta dificultad la enfrentan quienes duermen en la calle pero también quienes lo hacen en los refugios nocturnos. Desde NITEP explican que: “La situación se complejiza aún más, teniendo en cuenta que la mayoría de las personas en refugios debemos salir obligatoriamente a la calle cada mañana, que los lugares habituales donde pasamos el día (facultades, museos, Urbano, etc.) están siendo cerrados provisoriamente por órdenes gubernamentales”. Además, según lo conversado en la reunión las condiciones de habitabilidad de los refugios no son adecuadas para evitar el contagio de una enfermedad viral: los refugios suelen albergar a unas 30 personas que en ocasiones conviven en cuartos de hasta 8 personas y deben compartir un único baño.

En la convocatoria de NITEP agregan a las dificultades ya señaladas “las nuevas medidas tomadas por el Ministerio del Interior [que] autorizan a la policía a reprimirnos, lo que lleva a la imposibilidad de estar seguras en alguna parte”. El riesgo de que este tipo de medidas se intensifiquen en un período de crisis como el que se atraviesa actualmente es alto dado que la calificación de riesgo sanitario puede dar lugar a que se implementen medidas de internación compulsiva de las personas que pernoctan a la intemperie.

Todos estos riesgos vuelven indispensable visibilizar y generar acciones para atender a la situación de este sector de la población que es altamente vulnerable al contagio y al desarrollo crítico de la enfermedad provocada por el Coronavirus, y que por el momento no ha recibido respuestas claras del gobierno acerca de cómo minimizar las consecuencias de esta crisis sanitaria.

Alternativas de acción

Desde NITEP se discutieron algunas posibles vías de acción que ayudarían a minimizar los riesgos de contagio entre las personas en situación de calle. Entre otras medidas se propuso  que los centros permanezcan abiertos durante 24 horas, de modo que las personas que allí viven no se vean obligadas a desarrollar su cotidianeidad en la calle donde las posibilidades de contagio son mayores, y también teniendo en cuenta que los lugares que solían frecuentar durante el día están cerrando debido a las restricciones sanitarias.

Se planteó también la importancia de desarrollar un protocolo de cuidados de usuarios y usuarias y también de los trabajadores de los centros, para lo cual es indispensable contar con los insumos médicos y de higiene correspondientes. En la misma línea también se planteó la necesidad de contar con mayor información acerca del virus, la forma de cuidarse y de actuar en caso de presentar síntomas.

Además se estableció que es necesario habilitar más espacios para que la gente pueda habitar dignamente y en condiciones de salubridad adecuadas para el contexto de crisis sanitaria actual. Esto implica poder descongestionar los refugios existentes, a la vez que aumentar la capacidad para recibir a las personas que hoy están durmiendo a la intemperie.

Otras medidas aludidas en el encuentro refieren a la habilitación de espacios de acceso público  para que las personas en situación de calle que así lo deseen puedan “achicar” y hacer uso de servicios de higiene, y a la re-organización de los comedores de INDA frecuentados por muchas personas que se encuentran en calle, de modo de evitar las aglormeraciones.

Tras esta instancia NITEP ha estado en contacto con autoridades del MIDES, de la IM, y con organizaciones de la sociedad civil. Si bien desde el colectivo explican que de estos encuentros han surgido algunas propuestas de acción, según comunicaron el día 17 de marzo en sus redes sociales “No tenemos nada seguro de qué medidas se tomarán sobre el asunto”.

 

Texto: Fanny Rudnitzky y Gonzalo Gutiérrez

Foto: Archivo Radio Pedal

 

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En un comunicado fechado el 17 de marzo el SUTIGA, sindicato que nuclea a trabajadores/as tercerizados de MIDES e INAU se expresa la inviabilidad de llevar adelante las recomendaciones establecidas por el Ministerio de Salud Pública en los refugios y otros dispositivos de atención a personas en situación de calle, tanto por el riesgo para los propios usuarios y usuarias como para quienes integran los equipos técnicos que trabajan con esa población. Muchos de estos planteos están en consonancia con los formulados por NITEP.

Por su parte, la INDDHH emitió un comunicado el día 18 de marzo, allí se insta a las autoridades competentes a tomar medidas orientadas a garantizar los derechos de la población en situación de calle frente a la emergencia sanitaria. En ese comunicado recogen varias de las sugerencias formuladas por NITEP, como por ejemplo el desarrollo de protocolos que contemplen la realidad de las personas en situación de calle, la disponibilidad de cupos y condiciones de accesibilidad a los centros de acogida y la disponibilidad de insumos de higiene personal, entre otros. ___________________________________________________________________________

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